Huelga en Salud

Qué es lo reclama el personal de salud

Los trabajadores de los establecimientos del Ministerio de Salud (MINSA) de Piura están en huelga desde el pasado 20 de octubre, motivados por la inacción de las autoridades regionales frente a problemas tan específicos como son el pago de la deuda del Seguro Integral de Salud (SIS), el nombramiento del personal profesional y técnico de salud y el pago de una deuda, reconocida por el propio Gobierno Regional, de Asignaciones Extraordinarias por Trabajo Asistencial (AETA) de 2009.

Deuda del SIS
El SIS le adeuda a la región Piura alrededor de 6 millones de nuevos soles, lo que hace que los establecimientos de salud mantengan mantienen deudas con sus proveedores, personal contratado para brindar atención y sobre todo causa un serio desabastecimiento de los medicamentos e insumos médicos.
Si bien es cierto es un tema que tiene implicancia nacional requiere que nuestras autoridades políticas y las del sector salud planteen soluciones técnicas que permitan hacer que el sistema funcione realmente y no a medias como viene ocurriendo hasta la fecha.
Esto pasa necesariamente por reconocer que se requiere una mejor inyección de presupuesto y recordar que la concepción del SIS fue planteada por una Comisión de Alto Nivel en el 2001, en la que reconocidos expertos y de amplia trayectoria señalaron que se necesitaba para su puesta en práctica el 7% del Producto Bruto Interno (PBI). Actualmente todo el sector no llega ni al 2% del PBI. Esto explica claramente las deficiencias del sistema.
Estamos convencidos que existen profesionales competentes en la región que podrían aportar y consolidar una propuesta de aseguramiento regional que orienten mejor el presupuesto en salud y que garantice acceso a la salud de mayor calidad y equidad.

Nombramiento del personal de salud contratado
Los funcionarios del Gobierno Regional, antes de las elecciones regionales y municipales, ofrecieron nombrar a un 15% más de trabajadores de salud contratados haciendo uso de los saldos presupuestales. Esto causó gran expectativa entre el personal, pero pasadas y perdidas dramáticamente las elecciones, el gerente de Planeación y Presupuesto informó que no había saldos y que más bien existía una deuda de 2 millones y medio de soles. Entonces, cabe preguntarse ¿cuál era la intención del ofrecimiento antes de la justa electoral?
Y es que el nombramiento del personal profesional no médico contratado es un derecho que los trabajadores tienen desde el 14 de abril de 2005 en que se dio la Ley 28498 que a la letra dice, en su artículo 1º “Autorícese al Ministerio de Salud a efectuar el nombramiento de los profesionales de la salud no médicos cirujanos a nivel nacional que, a la fecha de entrada en vigencia de la presente Ley, se encuentren prestando servicios en la condición de contratados bajo cualquier modalidad”.
Cinco meses después, el 15 de setiembre, esta ley se reglamentó a través del Decreto Supremo 019-2005-SA, el mismo que fue elevado a categoría de Ley el 1 de diciembre mediante la Ley 28632. El reglamento especificaba que este proceso sería gradual a partir del año 2006, y hasta en un 15% anual. Sin embargo, el Decreto Supremo 020-2005-SA del 17 de setiembre de 2005, incorporó que dicho porcentaje “podrá ser ampliado de producirse modificaciones presupuestarias en el nivel institucional que posibiliten la disposición de mayores recursos”. Es decir, que podría nombrarse más personal si se dispone de mayor presupuesto.
Asimismo, el personal técnico asistencial y administrativo, personal de servicios y auxiliar asistencial está exigiendo también el cumplimiento de la Ley 28560 del 27 de junio de 2005 que ordena el nombramiento de este grupo de trabajadores. Esta ley también cuenta con su propio reglamento establecido a través del Decreto Supremo 097-2006-EF del 28 de junio de 2006, en el que se detalla la gradualidad de este proceso pero también desde el año 2006.
En suma, el personal de salud profesional no médico y el técnico, en todas sus modalidades, está reclamando, y con toda justicia, que se cumplan las leyes y las normas. Y no se debería llegar a los extremos de tomar medidas de fuerza si es que las autoridades del nivel nacional y regional cumplieran con la normatividad vigente.
Hasta la fecha, solo se ha nombrado el 45% del personal profesional no médico y apenas el 15% del personal técnico asistencial y administrativo; cuando –si se hubiese cumplido con las leyes- estuviese nombrado el 75% de los trabajadores de salud.

Pago de deuda por AETAS
El Decreto de Urgencia 013-2009 autorizó a los Gobiernos Regionales a pagar hasta seis Asignaciones Extraordinarias por Trabajo Asistencial (AETA) adicionales a favor del personal médico cirujano que incluye a los médicos residentes, profesionales de la salud no médicos, técnico asistencial y auxiliar asistencial, y seis Productividades adicionales al personal administrativo del Sector Salud de los Gobiernos Regionales, a partir del mes de enero de 2009. Esta norma no se cumplió en su totalidad. El personal de salud no médico, entre profesionales y técnicos, recibió solo el pago de 4 AETA entre enero y julio de 2009, y el pago de las seis presupuestadas a partir de agosto de dicho año. Es decir, el Gobierno Regional, quedó adeudando dos AETA mensuales en los primeros 7 meses del año. El importe de cada AETA es de S/. 30 (treinta nuevos soles), de allí que se señala que a cada personal de salud no médico de la región se le adeudan S/. 420 (dos AETA por mes (S/.30 cada una) por 7 meses).
La distribución de estas AETA era la siguiente: dos las pagaría el MINSA, dos el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y dos el Gobierno Regional. Y como podrán adivinar el Gobierno Regional no cumplió con su parte, de allí nace el conflicto.
Este pago no excluye al personal médico de la región y a ellos solo se les pagó 4 AETA durante 3 meses y luego, mediante una serie de obstrucciones administrativas, se les ha negado el acceso a este derecho. Ello ha motivado a que la Federación Médica del Perú Región Grau entable una querella judicial contra el Gobierno Regional sobre el pago de estas AETA, además del reciente paro del 3 de noviembre llevado a cabo por los médicos de la región por este punto, además de oponerse también al concurso interno de las plazas presupuestas, requerir el nombramiento de los médicos contratados, el pago de la deuda del SIS, entre otros reclamos.

Suspensión del concurso de las plazas presupuestadas
El concurso que se cuestionó durante la huelga fue el concurso interno de plazas presupuestadas, que sumaban alrededor de 300, con una no muy velada intención de favorecer a los cercanos a los círculos de poder. La sospecha se despierta al planificarse éste cuando al gobierno actual le faltan menos de dos meses para dejar los cargos y en medio de un proceso de transferencia con las autoridades entrantes. El pedido del concurso de estas plazas se ha hecho desde los hace casi 8 años y llamó la atención, que a pesar de haberse pedido durante tanto tiempo se trate de ejecutar tan apresuradamente, y sin tener bases de concurso muy claras, y sin la participación de los principales gremios de salud. Finalmente, y aunque no se quiere decir de ese modo, las presiones propias de la huelga y la de las propias autoridades elegidas que aún no están en el poder, permitieron que el concurso sea suspendido. El argumento o pretexto fue el memorándum del 27 de octubre de este año de la Gerencia de Presupuesto, Planeamiento y Acondicionamiento Territorial, la cual consideraba que no es recomendable que se asuma dicho compromiso de presupuesto por estar enmarcados en un proceso de transferencia por el término de la gestión.

Llamado de atención
Se debe por ello llamar la atención de la inoperancia de las autoridades salientes y señalar a las entrantes que hay compromisos específicos y pendientes con el sector salud, que no permiten mayores postergaciones. El sector debe manejarse técnicamente y no debe ser zarandeado por intereses políticos partidiarios. Las personas que trabajan en salud así lo reclaman y la población de Piura merece contar con servicios de salud que brinden mejor calidad y con mayor calidez.